Reflexion Personal
Lo que me llevo de la materia de Iteración es a no quedarse nunca con la primera idea, sino que todo lo contrario. Es importante seguir iterando constantemente, siendo siempre flexible con las ideas que a uno le van surgiendo a lo largo del proceso. A su vez, es importante adoptar una postura abierta a opiniones y sugerencias de los demás, para poder ir modificando el producto y, finalmente, llegar a eso que queremos lograr.
También aprendí a no frustrarse cuando algo no sale bien y tener presente que no todo proyecto exitoso funciona desde su primera implementación. En cuanto a mi producto final, creo que pude conseguirlo gracias a mi perseverancia y a seguir intentando más allá de los obstáculos que se me presentaron a lo largo del camino, a pesar de que muchas fueron trabas que me hicieron cambiar de rumbo rotundamente.
Mi aprendizaje final es que a la hora de crear algo nuevo es necesario intentarlo todo, más allá de si uno sabe o no hacerlo. Una idea es un punto de partida y a partir de ella hay que buscar la forma de llevarlo a cabo, con el mayor esfuerzo posible y teniendo en cuenta que es de la naturaleza humana fallar una, dos o cuantas veces sea necesario. Por ello, nunca hay que dejar de lado una idea por el hecho de no saber hacerlo. En fin, todo se trata de confiar en uno mismo y en el por qué de lo que estamos creando.
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